martes, 6 de marzo de 2007

LA DESERCIÓN, LA VERDADERA CAUSA.

Esto se debe a que la gran mayoría de la tropa votó por el Peje y no les cuadra la usurpación de la presidencia.

Desairan a la PFP PDF Imprimir E-Mail
lunes, 05 de marzo de 2007

La secretaría de la Defensa Nacional, a cargo del general Guillermo Galván y Galván, no transferirá obligatoriamente soldados a PFP.

Soldados y marinos invitados a pertenecer a la Policía Federal Preventiva con atractivos sueldos han rechazado la oferta / Hay 10 mil puestos a disposición y sólo se han enrolado 765 elementos

MEXICO, D.F., 4 de marzo (LA JORNADA).- Las secretarías de la Defensa Nacional y de Marina no transferirán obligatoriamente a más de seis mil efectivos a las filas de la Policía Federal Preventiva (PFP), tal y como había planeado inicialmente el gobierno federal.

En diciembre pasado, Felipe Calderón anunció en el campo militar de San Miguel de los Jagüeyes, Estado de México, que siete mil 500 soldados y dos mil 500 marinos se sumarían a la PFP; sin embargo, ni el Ejército ni la Armada de México aceptaron el traspaso de sus oficiales de manera obligatoria, y sólo consintieron en que la corporación policíaca abriera módulos de contratación en sus unidades.

A fin de convencer a soldados y marinos para que se incorporaran como agentes federales de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), ésta les ofreció salarios mensuales, de siete mil 308 hasta 56 mil 129 pesos.

Sin embargo, la invitación fue prácticamente desechada, según información recabada, de enero a la fecha apenas unos 700 soldados y 65 marinos (todos ellos de bajo rango) aceptaron, mientras que ningún oficial se enroló por considerarlo "una aventura sexenal".

(Se sospecha que el objetivo perseguido por el Gobierno Federal es el debilitamiento y desaparición a corto plazo del Ejército Mexicano, para ser sustituido por una Guardia Nacional semejante a la de Estados Unidos).

Ante este panorama, la PFP publicó su convocatoria para nuevos agentes, y llama la atención que, mientras hizo todo tipo de ofrecimientos a los militares y no puso como obstáculo su escolaridad, los civiles que quieran ingresar deben contar con licenciatura como mínimo, no tener antecedentes penales y no haber pertenecido a la Procuraduría General de la República (PGR) como agente de la Policía Federal Investigadora o Agente de la Policía Judicial Federal, ni como agente en otra corporación judicial.

La corporación ofrece una beca de dos mil 600 pesos mensuales durante tres meses de capacitación teórica y un sueldo mensual de 11 mil pesos.

Por otro lado, fuentes militares consultadas reconocieron que si bien, el sueldo que ofreció la PFP era superior al que perciben actualmente los soldados y que parecía una buena oportunidad, lo cierto es que al darse de baja perdían todos los derechos adquiridos en el servicio de las armas y que cuando mucho, obtendrían una compensación económica.

Además, añadieron, de acuerdo con la legislación castrense, para que un militar tenga derecho a pensión y atención médica debe tener cuando menos 20 años de antigüedad, y no es tan fácil dejar de un día para otro esas prestaciones.

Ante el fracaso de la propuesta para que soldados y marinos se incorporaran de manera definitiva a la PFP, los secretarios de la Defensa Nacional, general Guillermo Galván Galván y de Marina, almirante Mariano Francisco Saynez Mendoza, ofrecieron "prestar" a la policía federal los elementos que requiera para determinados operativos, pero mediante convenios de colaboración específicos y con la salvedad de que después los elementos regresarán a sus unidades.

Saynes Mendoza, confirmaron los informantes, precisó que enviará brigadas navales completas, desde el comandante de la unidad hasta los marinos, cuyos elementos estarán comisionados únicamente por un tiempo determinado. Según el oficio SSP/OM/008/2007, del cual se posee copia, en cada región y zona militar funcionarios de la SSP buscaron convencer a personal del Ejército Mexicano para integrarse a la PFP.

La dependencia que dirige Genaro García Luna, según refiere el escrito, trató de contratar personal castrense “a fin de contar con personal altamente capacitado y profesional que permita la salvaguarda de la vida, la libertad y la integridad de los ciudadanos”.

Los requisitos son ser ciudadano mexicano, tener de 18 a 45 años, 1.63 de estatura, como mínimo, estudios de secundaria o equivalente, y en cuanto al perfil, “contar con el curso básico de policía o pertenecer al cuerpo de Policía Militar”.

Los suboficiales y personal de tropa tendrían “un ascenso de grado, lo que le beneficiará doblemente en jerarquía y percepciones”. Los suboficiales obtendrían 10 mil 698 pesos; sargentos primeros, ocho mil 787; sargentos segundos, ocho mil 12, y los cabos, siete mil 308 pesos. Sin embargo, funcionarios de la SSP federal aceptaron que si bien, todas las prestaciones que se ofrecen forman parte de los proyectos que se han elaborado para integrar a efectivos militares en el cuerpo nacional de policía, la Secretaría de Hacienda no ha dado su aval para la constitución de tal órgano policiaco y, por ende, no se ha aprobado una partida presupuestal para cubrir esos pagos.

En ese contexto, revelaron que desde el inicio de la PFP en diciembre de 1998, no se ha logrado concretar la transferencia de militares y marinos a la corporación policíaca, incluso los tres mil integrantes de la Tercera Brigada de la Policía Militar; tampoco se concretó la transferencia de los cinco mil efectivos que darían inicio a esa corporación, pues de la Tercer Brigada de la Policía Militar, unos tres mil, eran “prestados” temporalmente, y los dos mil nunca se incorporaron a la dependencia, lo que ha impedido hasta la fecha, la consolidación y crecimiento de la PFP.